Un niño y una tablet
Érase una vez un niño y una tablet. El niño se llamaba Trini y la tablet se llamaba Rovi.
Un día cuando estaban viendo la tele, se le había interrumpido internet.
Trini no sabía qué hacer.
A Rovi se le había ocurrido algo, si el internet se había ido, entonces volvería, habían esperado e internet había vuelto, así podían hacer fiestas, conectarse con los amigos y mandarle cosas.