La seguridad en tus manos
Érase una vez...
una adolescente muy amable y encantadora. Era su gran día, su 15 cumpleaños, un día muy importante para ella. Su gran comportamiento y esfuerzo convenció a sus padres para comprarle un teléfono móvil.
A la adolescente nunca le gustaron los dispositivos, pero sus compañeros se burlaban mucho de ella por esa razón.
Días después regresó alegremente al instituto y, de pronto, Mandy (su mayor acosadora), se puso enfrente de ella y le comentó: "Ahora que tienes móvil dte puedes unir a nuestro club". La adolescente no sabía como reaccionar tras todo el bullying que existía, pero también sabía que si no aceptaba la seguirían acosando, así que decidió aceptar.
Semanas después era una niña distinta. Estaba siempre en redes sociales, era como su oxígeno.
Un día, un extraño le escribió en esa red social. Ella no le hizo caso, pero días después su padres decidieron revisar su teléfono, y lo que encontraron nunca se lo habrían esperado de su hija... Muchas personas pedían su dirección. Rápidamente sus padres quitaron todas sus redes y la inscribieron en un nuevo instituto, pero uno especializado en el buen uso de internet. Los primero días la adolescente no hacía caso, pero al final del trimestre era la misma niña del principio.
Y por eso siempre tienes que usar bien el Internet.