Grandes Ciudadanos digitales
Estoy en mi habitación tumbada en la cama mirando el móvil y el ordenador al mismo tiempo mi madre llama a la puerta y me dice -a comer - yo le contesto – ya voy- salgo de mi habitación arrastrándome por los suelos.
Por cierto, me llamo Victoria, pero me suelen llamar Vic. Entro en el salón y me siento en la silla. Me pongo a comer mientras veo la tele. Después voy a mi habitación porque me llama Alicia para que quedemos en el parque y hablar de un asunto grave.
Cuando estoy en el parque Alicia me llama –Victoria, ven, corre- yo me acerco y Alicia me cuenta- una amiga me ha dicho que su hermana mayor ha tenido un problema con internet- continua – han colgado una foto de ella con los dientes rotos, las orejas de elefante, pelo de bruja y los ojos rojos- Dios mío- digo yo.
Al día siguiente vibra mi teléfono. Tengo un mensaje. Al verlo se me abren los ojos como platos, muchas personas más tienen fotos super vergonzosas. Cuando estoy desayunando les cuento a mis padres lo ocurrido, ellos me contestan – gracias por contárnoslo hablaremos con los padres de esos niños y denuncien el caso – me preparo y me voy al colegio.
Una vez allí le cuento a la profesora junto a Alicia lo mismo que le dije a mis padres. La profesora nos dijo que también hablaría con los padres de esos niños. Más tarde entra la policía y nos dan una charla sobre las consecuencias que tiene utilizar el internet mal, nos cuentan que hay personas que han ido a la cárcel por ese tipo de cosas. A la salida vi un grupo de adolescentes con aspecto sospechoso.
Se lo dije a Alicia y decidimos seguirles, hasta que llegamos a una calle desconocida grafitis por todos lados. Me llamo la curiosidad una puerta que tenía una señal de prohibido. Más tarde vimos entrar por la puerta a un grupito de adolescentes junto a un hombre mayor no le vi bien la ropa, pero Alicia si y me dijo- Es un policía, pero ¿qué hace allí? - no lo sé, esto es muy raro - nos ha cercamos más sin que nos viesen. entramos por la puerta con mucho cuidado para que no nos pillasen, cruzamos un pasillo y después unas escaleras hasta que llegamos a un cuarto allí estaban una peña de piratas informáticos la sala estaba llena de ordenadores y de aparatos extraños.
Pasado un tiempo empezaron una especie de reunión, escuchamos una conversación y se escuchaba- el jefe nos seguirá pagando si robamos más información - Alicia y yo nos miramos y me hace un gesto para que salgamos. Al salir llamamos a la policía y a todo el colegio.
Al día siguiente todo estaba solucionado la policía detuvieron a los piratas informáticos y a su jefe, borraron las fotos de internet y todo volvió a la normalidad.
Nuestro derecho a la intimidad es muy grande, por eso si todos nos respetamos lograremos ser grandes ciudadanos digitales.
FIN