Llevadas a otro mundo
Llevadas a otro mundo
Era sábado por la tarde, yo y mi amiga estábamos en casa, jugando a un juego en el móvil, cuando de repente, nos aparece un anuncio. El anuncio decía que para ganar una tablet debíamos hacer lo siguiente: escribir el nombre de nuestros padres, la dirección de la casa y el teléfono. Aceptamos, escribimos todo lo necesario para poder ganar ese premio. Poco después, aparecimos en otra realidad, como si fuese el videojuego que estábamos jugando. Nos dimos cuenta de que habíamos aparecido dentro del juego y que la partida se seguía desarrollando con nosotras como personajes. Al principio fue muy sorprendente y divertido, a medida que avanzaba la partida nos fuimos agotando hasta quedar exhaustas. Sin embargo, no había manera de parar el juego, ahora ya no era tan divertido. De repente, se nos mostró una pantalla en la que pudimos ver como nuestros padres eran chantajeados por unos desconocidos que pedían un rescate a cambio de nuestras vidas. Mi amiga y yo entramos en pánico, pero nos armamos de valor y buscamos la manera de poder escapar del juego. De pronto, apareció entre nosotras un conejo que nos guió durante un recorrido en el que íbamos encontrando piedras preciosas con unos colores muy llamativos y las íbamos recolectando. Al llegar al final del camino nos dimos cuenta de que todas encajaban entre ellas y al hacerlo, se abrió un portal que nos devolvió a nuestras casas, sanas y salvas.
¡Desde luego aprendimos la lección!